Este capítulo ofrece un análisis final de los ecosistemas de innovación en Portugal, España y los Países Bajos, destacando los factores clave que favorecen y dificultan el uso de tecnologías emergentes para la participación ciudadana. Examina el papel de la infraestructura digital, la colaboración entre múltiples partes interesadas y el liderazgo de las Administraciones locales en el fomento de la innovación. También señala retos compartidos, como la inconsistencia en la financiación, la inclusión digital y los déficits de capacidades en el sector público. El capítulo concluye con recomendaciones prácticas para los Gobiernos, basadas en las lecciones aprendidas en los tres países, y propone vías de investigación futura para seguir avanzando en la participación ciudadana mediante el uso de tecnologías emergentes.
De cómo los ecosistemas de innovación fomentan la participación ciudadana utilizando tecnologías emergentes en Portugal, España y los Países Bajos

3. ¿Qué pueden hacer los Gobiernos para mejorar el ecosistema de innovación para la participación ciudadana utilizando tecnologías emergentes?
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La innovación en la participación ciudadana en Portugal, España y los Países Bajos se apoya en una sólida infraestructura digital, en la colaboración de múltiples partes interesadas y en una amplia experimentación a nivel local. Los tres países cuentan con infraestructuras digitales, que proporcionan una base para la participación ciudadana facilitada por la tecnología. La colaboración entre el sector público, el sector privado, el mundo académico y la sociedad civil en plataformas como los Foros de Gobierno Abierto y en iniciativas individuales en todos los países es un factor esencial para facilitar la innovación y la generación de conocimiento en materia de participación ciudadana, y cada sector desempeña un papel clave para desarrollar nuevos enfoques y garantizar que la participación sea inclusiva y eficaz. Los estándares de código abierto en el desarrollo de tecnología, que facilitan la transparencia y la creación de comunidades en torno a las plataformas digitales, son un principio clave en cada país. Por último, en los tres países son los municipios y las Administraciones locales los que impulsan iniciativas innovadoras de participación ciudadana.
En sus ecosistemas de innovación para la participación ciudadana, los tres países comparten retos comunes, como la falta de dirección estratégica, de confianza en el gobierno, de financiación sostenible, de inclusión digital y de capacidades en la Administración Pública. Los tres países se enfrentan a retos a la hora de establecer una dirección estratégica y una orientación claras, sostenidas y de ámbito nacional para las iniciativas de participación ciudadana. Esto propicia esfuerzos desestructurados y enfoques inconsistentes en los distintos niveles de Gobierno. La pérdida de confianza en las instituciones gubernativas y el posible uso indebido de la tecnología son preocupaciones compartidas, que pueden reducir la eficacia de los esfuerzos de participación ciudadana y la innovación en este campo. La falta de financiación consistente y sostenible para las plataformas de participación digital de código abierto y métodos innovadores genera incertidumbre y frena la colaboración y la innovación. Aunque en distintos grados, los tres países se enfrentan al reto de garantizar que las herramientas de participación digital sean accesibles y utilizables por todos los segmentos de la población. Por último, la falta de aptitudes y capacidades para diseñar y facilitar la participación ciudadana en la Administración Pública hace que las iniciativas no siempre sean eficaces o se comuniquen bien y pueden ocasionar que los ciudadanos participantes tengan experiencias negativas.
Existen diferencias entre los países en cuanto a los actores que inician y promueven las iniciativas de participación ciudadana, la estructura de sus ecosistemas, su uso de la tecnología y los niveles de alfabetización digital. En Portugal y los Países Bajos, el sector público, sobre todo a nivel municipal, es el principal impulsor de la participación ciudadana. En Portugal, las entidades del Gobierno central, especialmente la AMA, desempeñan un papel destacado fomentando y apoyando la participación ciudadana efectiva y la innovación en este campo, y hay pocos actores del sector privado que trabajen en participación ciudadana. En España, las organizaciones de la sociedad civil desempeñan un papel más preponderante, junto a las Administraciones locales, en el estímulo a la innovación en participación ciudadana, y el Foro de Gobierno Abierto actúa como un importante coordinador entre sectores a nivel nacional. El ecosistema de los Países Bajos cuenta con prácticas más consolidadas en cuanto a intercambios entre sectores, continuidad y regularidad de las iniciativas, e intensidad y proactividad de los actores del sector privado, mientras que instituciones del sector público como Kennisknooppunt Participatie e iniciativas como OpenStad proporcionan anclajes para la colaboración.
El uso y desarrollo de herramientas de participación digital está más extendido y consolidado en España y los Países Bajos que en Portugal. Esto concuerda con sus mayores índices de alfabetización digital y uso de internet, así como con la presencia de un mayor número de desarrolladores tecnológicos trabajando sobre el terreno, especialmente en el sector privado y la sociedad civil. Aunque los actores de los tres países señalan la financiación sostenible como un problema, en el caso de España y los Países Bajos se especifica que es más un reto para las iniciativas establecidas que pretenden innovar en participación ciudadana, mientras que en Portugal se considera un problema para las empresas emergentes y las organizaciones de la sociedad civil. Del mismo modo, Portugal destaca entre estos países por señalar el pequeño tamaño de su mercado como una barrera para la ampliación de escala de las innovaciones y por necesitar una mayor colaboración internacional.
Basándose en las experiencias de Portugal, los Países Bajos y España, la Tabla 3.1 presenta las lecciones clave y propone acciones para que los Gobiernos mejoren los ecosistemas de innovación para la participación ciudadana y las tecnologías emergentes. Las acciones propuestas suelen ir asociadas a ejemplos concretos de buenas prácticas de los tres países considerados.
Tabla 3.1. Lecciones y acciones
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Lecciones |
Acciones propuestas |
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1. Reclamar una dirección estratégica nacional clara para unificar los actuales esfuerzos desestructurados para mejorar la participación ciudadana con tecnologías emergentes . |
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2. La innovación en la participación ciudadana es impulsada en gran medida por las Administraciones locales |
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3. Los organismos nacionales que coordinan a los distintos actores y promueven buenas prácticas pueden apoyar la innovación y el éxito de las iniciativas de participación ciudadana que utilizan tecnologías emergentes |
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4. La innovación en la participación ciudadana se ve frenada por la falta de capacidades del sector público para facilitar iniciativas e implantar nuevas tecnologías |
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5. La inconsistencia en la financiación de las herramientas e iniciativas de participación ciudadana genera una incertidumbre que frena la colaboración y la exploración y el desarrollo de innovaciones |
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6. Los estándares compartidos y el compromiso con el código abierto facilitan una colaboración eficaz y la adaptación de las herramientas a diferentes contextos. |
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7. La innovación en la participación ciudadana es posible gracias a la colaboración y los intercambios multisectoriales |
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8. La propia tecnología debe desarrollarse de forma inclusiva, responsable y participada, y sus aplicaciones a la participación ciudadana deben respetar los valores democráticos |
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9. Los ciudadanos necesitan garantías sobre cómo se utilizan sus aportaciones en la toma de decisiones |
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10. La colaboración internacional ofrece oportunidades para compartir, mejorar y ampliar la escala de los conocimientos. |
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De cara al futuro, hay cinco vías inmediatas para seguir explorando:
1. La investigación de los efectos a largo plazo de los distintos enfoques participativos (incluidos los que emplean tecnologías emergentes) sobre la confianza en el Gobierno y el compromiso cívico proporcionaría información valiosa para los responsables políticos y apoyaría la adaptación y ampliación de escala de las buenas prácticas.
2. La exploración de cómo tecnologías emergentes como la IA y la cadena de bloques pueden integrarse de manera eficaz y ética en los procesos de participación ciudadana, garantizando al mismo tiempo la inclusividad, es un área crítica para la investigación futura.
3. El estudio de la eficacia de los enfoques para crear capacidad de gestión y evaluación de los procesos participativos y aumentar la concienciación sobre el valor de la participación ciudadana en la Administración Pública podría ayudar a abordar las carencias de capacidad detectadas en los tres países.
4. El examen de cómo puede mejorarse la colaboración internacional y el intercambio de conocimientos para acelerar la innovación en métodos y tecnologías de participación ciudadana representa una importante oportunidad para avanzar en este campo.
5. El perfeccionamiento y consolidación del uso de enfoques sistémicos para comprender los ecosistemas de innovación, sobre la base de la metodología empleada en este estudio, puede aportar a los Gobiernos ideas sólidas y pertinentes para diseñar, aplicar y evaluar políticas dirigidas a mejorar la participación ciudadana con tecnologías emergentes.
6. A medida que las tecnologías emergentes transformen la sociedad y la Administración Pública, la investigación y la experimentación continuas serán cruciales para garantizar que los procesos participativos sigan siendo eficaces, inclusivos y acordes con los valores democráticos. Aprendiendo de las experiencias de Portugal, España y los Países Bajos, y continuando la exploración de nuevos enfoques, los responsables políticos y los profesionales pueden trabajar para crear sistemas democráticos más sólidos y adaptativos que impliquen de forma significativa a los ciudadanos en los procesos de toma de decisiones que configuran la sociedad que les rodea.